Enamorarse de sus gemelos: uno a la vez
A menudo, las madres que están embarazadas de su segundo hijo tienen sentimientos esperables de inquietud acerca de cómo el nacimiento del nuevo bebé afectará su apego con su primogénito. Las mamás que ya han enfrentado esta situación hacen referencia a una conocida viñeta para ayudar a las futuras mamás a desarrollar la resonancia emocional necesaria para comprender y manejar la nueva dinámica familiar. Piense en cómo se sentiría si su esposo llegara a casa con una nueva esposa y le dijera que de ahora en adelante vivirá con ustedes dos. Bromas aparte, la mayoría de los sistemas familiares se adaptan a un nuevo hermano a su debido tiempo.
Sin embargo, a diferencia de los padres de hijos únicos que esperan un segundo nacimiento, los padres que esperan dos bebés al mismo tiempo enfrentan desafíos únicos y diferentes. Dado que las demandas físicas y emocionales de cuidar a dos bebés son abrumadoras, no pueden darse el lujo de sentirse apegados a cada bebé de inmediato. He aconsejado a muchos padres que expresan un tremendo confl o acerca de tener diferentes sentimientos por cada bebé. Sin embargo, después de que estos sentimientos incompatibles se articulen y reformulen dentro de una perspectiva empática, la situación puede mejorar.
¿Cómo te enamorás de cada gemelo simultáneamente y por igual? USTED NO. El objetivo es amar a cada gemelo individualmente. Permítanme compartir una historia. De vez en cuando me cruzaba con una conocida que es madre de mellizos niño/niña de 2 años y medio. Muchas veces compartía información e historias sobre su hijo, haciendo referencias casuales a su hija. En nuestra última conversación me contó cómo su hijo había empezado a usar la pelela u orinal solo. Naturalmente, estaba emocionada y relató cómo había compartido las emocionantes noticias con sus amigos y familiares. Cuando le pregunté por su hija, su afecto cambió de alegría a preocupación. Habló sobre la negativa de su hija a cenar y sobre cómo esta difi ultad para alimentarse le recordó los problemas de alimentación que le habían causado preocupación desde el nacimiento de su hija.
Mamá y su hijo pequeño fueron dados de alta juntos del hospital, mientras su hija permaneció en la UCIN durante una semana debido al bajo peso al nacer. Cuando llegó a casa, tuvo que llevarla al consultorio del pediatra todos los días para que la pesaran. Más tarde, las difi ultades para tragar requirieron una extensa terapia ocupacional para enseñarle a su hija a comer correctamente. Las luchas de su hija la hicieron sentir impotente, inadecuada y ansiosa. Le molestaba que la llegada de su hija a casa la hiciera sentir como si el vínculo amoroso que había creado con su hijo se hubiera interrumpido. Admitió sentir una terrible vergüenza y autodesprecio debido a estos pensamientos.
Le aseguré que estos sentimientos son normales y esperados para las familias que crían gemelos. Los estudios muestran que las circunstancias específi as del nacimiento de gemelos, a menudo, perpetúan impresiones duraderas con respecto a las perspectivas y sentimientos de los padres. Por ejemplo, algunos padres sienten sentimientos más positivos por el niño que llega primero a casa del hospital, el niño que pesa más, el niño que duerme más o el niño que es más sociable; la lista sigue y sigue. Lo importante es recordar que estos sentimientos o percepciones iniciales no tienen que permanecer intratables o interminables. Pueden ser articulados, reformulados y reelaborados. Caso en cuestión: mi conocida me llamó para contarme sobre un momento transformador que experimentó con su hija hace unas semanas. Ella lo describió de la siguiente manera: “la otra mañana le dije a mi hija que le había estado guardando unos adornos para el cabello muy especiales. Ahora que su cabello había crecido tanto, era el momento perfecto para ver cómo se veían. Llevé a mi hija a mi baño. Ambas miramos nuestro reflejo juntas en el espejo. Experimentamos un momento de ‘enamoramiento’ : le dije lo hermosa que se veía y cuánto la amaba. Ella sintió mi autenticidad, amor y afi Nuestra relación ha sido diferente desde ese momento. Vamos a tomar un café solas y estoy haciendo un esfuerzo especial para recuperar el tiempo perdido perdonándome a mí misma, disfrutando lo que he recuperado y creando más tiempo a solas con ella”.
Las comparaciones entre gemelos son inevitables y evitables. No obstante, ser capaz de amar a cada niño creando una fuerte conexión con cada uno es clave para una crianza exitosa. Tomarse el tiempo para estar a solas con cada niño/a ayudará a sus gemelos/as a forjar relaciones emocionales saludables entre ellos y con el mundo exterior.
Traducido por Laura Pérgola Multifamilias Magazine N15 https://multifamilias.org.ar/publicaciones/